¿Son todas las posturas igual de respetables?, ¿cuál es la diferencia entre respetar y estar de acuerdo?, ¿cómo explicar esto a los niños según su edad?, ¿cuál es al umbral entre agresividad y violencia?, ¿cómo identificar el acoso escolar?, son cuestiones que se debaten dentro del marco de un programa de mediación escolar. Pocos escenarios hay más adecuados como el de una mediación para aprender a dialogar sobre lo que para cada cual es importante. Es una oportunidad para desarrollar habilidades comunicativas y relacionales resolviendo pequeños conflictos y previniendo mayores.

Catalina Bernaldo de Quirós

Normalmente, un programa de mediación escolar se inicia con una formación sobre las peculiaridades del proceso y las técnicas de resolución de conflictos, incorporando casos prácticos y ejercicios para que todo quede claro. Algunas sugerencias para que esto después de ponga en práctica, son los siguientes:

1. Que no quede en un mero curso teórico. Poniendo en práctica el programa se crean escenarios únicos para aprenden a combatir actitudes y comportamientos violentos.
2. Aplicar la mediación para prevenir más que para curar. El conflicto forma parte de toda relación humana y no es un problema en sí mismo si se afronta asertivamente.
3. Implicar a profesores, alumnos y padres. Es recomendable que participen alumnos desde 6º de Primaria hasta 1º de Bachillerato.
4. Nombrar a alumnos “hermanos mayores” para que acompañen a otros de cursos inferiores ayudándoles en lo relativo a la resolución de conflictos.
5. Formarse continuamente para reforzar al equipo de mediadores y formar a los nuevos integrantes.
6. Propiciar activamente el uso del buzón de mediación. Virtual o físico, sirve para que cuando alguien detecta un conflicto, anónimamente, comunique los nombres y curso de las personas enfrentadas. El coordinador encargado de revisarlo diariamente propondrá a los implicados resolverlo con mediación. Si aceptan, se acuerda el día para la sesión, se lleva esta a cabo, se firma el acuerdo y, pasadas unas semanas, se revisa el caso.

Catalina Bernaldo de Quirós.

Mediadora y Pedagoga

Directora del Gabinete de Mediación “Co-Mediacion”

Más info en: www.co-mediacion.com

Mediación

Notes on School Mediation

Are all positions equally respectable? What is the difference between respecting and agreeing? How can we explain this to children according to their age? What is the threshold between aggressiveness and violence? How can we identify school bullying? These are issues that are debated within the framework of school mediation. There are few settings more suitable than mediation in order to learn to converse about what is important for each person. It is a chance to develop communication and relationship abilities by resolving small conflicts and preventing bigger ones. Normally, a school mediation program begins with education about the particularities of the process and conflict resolution techniques, incorporating practical examples and exercises to ensure that everything is clear. Some suggestions so that this can be put into practice afterwards are as follows:

1. It shouldn´t merely be a theoretical course. By putting the programme into practice, unique scenarios are created in order to learn to combat violent attitudes and behaviour.
2. Apply mediation to prevent more than to cure. Conflict forms part of all human relations and it isn´t a problem in itself if it is tackled assertively.
3. Involve teachers, pupils and parents. It is recommended to involve pupils from 6th year of Primary education up to the 1st of the Baccalaureate.
4. Appoint pupils as “older siblings” so that they can support others from years below them, helping them in relation to conflict resolution.
5. Have ongoing training in order to strengthen the team of mediators and train new members.
6. Actively encourage the use of the mediation letter box. Virtual or physical, it is used so that when someone detects a conflict, anonymously, they can report the names and year of the people in a confrontation. The coordinator responsible for checking it each day will propose that those involved resolve the matter with mediation. If they accept, a day is agreed for the session, it is carried out, the agreement is signed, and, after a few weeks, the case is reviewed.