El nuevo gestor de conflictos: una reforma hecha realidad
Tras años de debate y expectativas, el pasado jueves 19 de diciembre fue definitivamente aprobada en el Congreso la esperada Ley de Eficiencia Procesal del Servicio Público de Justicia, un punto de inflexión para el sistema judicial español. Esta nueva ley transforma el sistema modernizándolo y haciéndolo más accesible. Su propósito clave es agilizar los procedimientos judiciales, aliviar la saturación de los Tribunales e impulsar el uso de Métodos Adecuados de Solución de Conflictos (MASC), en espacial el de la mediación y la conciliación privada.
Cómo siempre digo, la mediación ofrece la posibilidad de gestionar y resolver conflictos con eficiencia económica y, además, de manera saludable, pues no sólo implica un esfuerzo de dialogo consensuado, sino también, supone un aprendizaje en inteligencia emocional. Al situar a las partes implicadas como protagonistas del proceso, se fomenta la madurez personal y la toma de conciencia social y ciudadana.
Esta nueva Ley, pone, por tanto, al servicio del ciudadano, mediadores y profesionales de la gestión de conflictos capaces de guiar negociaciones ayudando a los implicados a resolverlos de manera autónoma, informada y responsable.
Su implementación exitosa depende, sin duda, de un perfil profesional cada vez más necesario: el del gestor de conflictos, un facilitador capaz de liderar, desde la neutralidad, negociaciones para lograr acuerdos sostenibles en el tiempo.
Entre los puntos clave de la Ley, cabe destacar:
- Obligatoriedad de los MASC. La Mediación y la Conciliación privada se introducirán como requisito previo en la mayoría de los procedimientos civiles y mercantiles.
- Juicios telemáticos, para facilitar el acceso y reducir costes.
- Procedimiento testigo, como mecanismo para evitar resoluciones contradictorias en litigios similares.
- Inclusión y accesibilidad con un énfasis en facilitar la participación de personas mayores y colectivos vulnerables.
- Reformas en apelaciones y ejecuciones para agilizar resoluciones y reducir cargas innecesarias.
En síntesis, para los ciudadanos de a pie, la Ley facilita un acceso más rápido y económico a la Justicia, evitando prolongados litigios. Las empresas también se beneficiarán reduciendo costes operativos asociados a pleitos largos y promoviendo entornos empresariales más saludables. Todo ello no sólo modernizará el sistema judicial, sino que también empoderará a la sociedad al abrir nuevas puertas hacia una resolución de conflictos más humana, ágil y sostenible. Si quieres informarte sobre cómo formarte en el uso de herramientas específicas que aplica un gestor de conflictos o, simplemente, deseas, pedir cita para consultar cómo sería el proceso de mediación apropiado para tu caso, entre en www.liderazgomediador.com, escríbeme un e-mail a [email protected] o un Whatsapp al +34692250336.
The new conflict manager: a reform made reality
After years of debate and expectations, last Thursday, December 19, the long-awaited Law on Procedural Efficiency of the Public Justice Service was finally approved in Congress, a turning point for the Spanish judicial system. This new law transforms the system by modernizing it and making it more accessible. Its key purpose is to streamline judicial procedures, alleviate the saturation of the Courts and promote the use of Appropriate Methods of Conflict Resolution (ADR), especially mediation and private conciliation.
As I always say, mediation offers the possibility of managing and solving conflicts with economic efficiency and, in addition, in a healthy way, since it not only implies an effort of consensual dialogue, but also a learning process in emotional intelligence. By placing the parties involved as protagonists in the process, personal maturity and social and civic awareness are promoted.
This new Law, therefore, places at the service of citizens, mediators and conflict management professionals capable of guiding negotiations and helping those involved to resolve them in an autonomous, informed and responsible manner.
Its successful implementation depends, without doubt, on an increasingly necessary professional profile: that of the conflict manager, a facilitator capable of leading, from neutrality, negotiations to achieve sustainable agreements over time.
Among the key points of the Law, the following should be highlighted:
1. Mandatory nature of ADR. Mediation and private conciliation will be introduced as a prerequisite in most civil and commercial proceedings.
2. Telematic trials, to facilitate access and reduce costs.
3. Witness procedure, as a mechanism to avoid contradictory resolutions in similar litigation.
4. Inclusion and accessibility with an emphasis on facilitating the participation of the elderly and vulnerable groups.
5. Reforms in appeals and enforcement to streamline resolutions and reduce unnecessary burdens.
In summary, for ordinary citizens, the Law facilitates faster and cheaper access to justice, avoiding lengthy litigation. Businesses will also benefit by reducing operating costs associated with lengthy litigation and promoting healthier business environments. All of this will not only modernize the judicial system, but also empower society by opening new doors towards more humane, agile and sustainable dispute resolution. If you want to get information on how to be trained in the use of specific tools applied by a conflict manager or, simply, you want to make an appointment to consult how would be the appropriate mediation process for your case, enter www.liderazgomediador.com, write me an e-mail to [email protected] or a Whatsapp to +34692250336.