Pagar la cuenta, por Carlos Rodríguez Braun

Opinión, Carlos Rodríguez Braun

La pandemia ha ensombrecido a España con miles de muertos. Y su coste económico será abultado en términos de paro e impuestos.

El desempleo aumentaba ya en 2019, pero la pandemia lo ha hecho explotar. Las estimaciones de organismos públicos y privados, como el Fondo Monetario Internacional o el BBVA, pronostican para este año una tasa de paro superior al 20 % de la población activa. La desocupación se cebará en las regiones donde tengan más peso los sectores económicos más expuestos al cierre de la economía. Es lo que sucede con nuestra Andalucía, debido principalmente al turismo y la hostelería.

Carlos Rodríguez Braun

Algo parecido puede afirmarse en relación con la Hacienda Pública. Su situación ya se estaba deteriorando el año pasado, y la crisis de 2020 será catastrófica, con un déficit estimado en el 9,5 % del PIB, el más alto de Europa. Esto abocará al Estado español a una situación insostenible, que en teoría debería ser ajustada mediante una combinación de las tres medidas clásicas: menos gasto, más deuda y más impuestos. Y las tres resultan problemáticas.

Es difícil bajar el gasto cuando el Gobierno ya lo estaba incrementando irresponsablemente antes del virus, y la tendencia se acentuará considerablemente en 2020, no solo por la caída en la actividad, que disparará las prestaciones por desempleo, sino por las propias iniciativas gubernamentales, como la llamada “renta mínima”. Siempre se puede aumentar la deuda, pero su coste probablemente tenderá a subir, y esto significa menos dinero para atender a los demás capítulos del gasto. Por fin, la subida de impuestos es políticamente delicada para el Gobierno, en la medida en que no pueda convencer a la población con la habitual excusa de que los mayores impuestos solo recaerán sobre “los ricos”.

En resumen, la cuenta de esta pandemia la van a pagar, como siempre, la mayoría de los ciudadanos, porque se quedarán sin trabajo y, los que tengan la suerte de conservar el empleo, serán empobrecidos por los mayores impuestos. Consuela pensar, sin embargo, que la factura será también política, y que las autoridades deberán hacerle frente, tarde o temprano.


Paying the bill

Carlos Rodríguez Braun

The pandemic has cast a shadow over Spain with thousands of deaths. And its economic cost will be large in terms of unemployment and taxes.

Unemployment was already rising in 2019, but the pandemic has made it explode. Estimations by public and private bodies, such as the International Monetary Fund and BBVA, predict an unemployment rate this year of over 20% of the active population. Unemployment will burden regions where economic sectors that are more exposed to the shutdown of the economy have the greatest influence. This is the case in our Andalusia region, mainly due to tourism and the hospitality sector.

Something similar can be stated in relation to Public Finances. The situation was already deteriorating last year, and the crisis in 2020 will be catastrophic, with an estimated deficit of 9.5% of GDP, the highest in Europe. This will lead the Spanish State into an unsustainable situation, which in theory should be adjusted through a combination of the three classic measures: less spending, more debt and more taxes. And the three measures are problematic.

Opinión, Carlos Rodríguez Braun

It is difficult to lower spending when the Government was increasing it irresponsibly before the virus, and the trend will be exacerbated considerably in 2020, not just due to a drop in activity, which will lead to a spike in unemployment benefit payments, but also due to the initiatives of the government, such as the so-called “minimum income”. It is always possible to increase debt, but its cost will probably tend to increase, and this means less money to deal with other areas of expenditure. Lastly, the rise in taxes in politically delicate for the Government, in so far as it cannot convince the population with the standard excuse that higher taxation will only affect “the rich”.

In summary, the bill for this pandemic will be paid, as always, by the majority of citizens, because they will be left without work and, those who are lucky enough to keep their jobs, will be left poorer by higher taxes. However, it is comforting to think that the bill will also be political, and that the authorities will have to pay it sooner or later.