Mediación: ¿cómo resolveremos conflictos en el futuro?
Los resolveremos a través de procesos de dialogo colaborativo y mediado. Por ejemplo, veamos lo amplio que es el concepto actual de violencia de la OMS y la paradoja que sostiene: La OMS define violencia como el uso deliberado de la fuerza física o el poder ya sea en grado de amenaza o efectivo, contra uno mismo, otra persona, o un grupo o comunidad, que cause o tenga muchas probabilidades de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o privaciones. Como veis, abarca muchísimos supuestos. Sin embargo, nuestras sociedades, en su enorme mayoría, se rigen por constructos basados en el mantenimiento y el control de la violencia. ¿Cómo se explica esto y en qué se traduce?
Johan Galtung, sociólogo y matemático noruego, gran mediador, fallecido hace meses, explicó muy bien cómo nuestras culturas sostienen la violencia a través de la legitimación de actitudes que refuerzan prejuicios y se plasman en discursos comerciales, políticos, películas, programas de televisión, redes sociales y, también, en la manera de interactuar dentro de nuestras instituciones y entre ellas.
Entonces, si tomamos, por un lado, la teoría y, por otro, nos fijamos en cómo funcionan realmente nuestras sociedades y lo sobrecargados que están nuestros Juzgados, queda demasiado evidente la necesidad de fomentar la Mediación como proceso que favorece la toma de perspectiva, e “inmuniza”, de alguna manera, frente a estímulos e ideas que producen estrés, preocupación, desconfianza y muchas otras emociones y estados que caracterizan las interacciones violentas. Los procesos de mediación implican procesos de toma de conciencia. Son procesos que favorecen el pensamiento crítico porque ayudan a ordenar la información, priorizarla según unos valores y objetivos personales, propios y, seguidamente, comunicar opiniones de acuerdo con nuestros deseos e intereses y no a miedos.
El cambio que socialmente facilitan dichas herramientas es el de pasar de copiar las opiniones de otros a fomentar la creatividad y la generación de conocimiento in situ, a partir de la resolución de problemas existentes y que es preciso dialogar sobre ellos para resolverlos.
En la base de esto, encontramos que la manera de percibir, las partes enfrentadas, todo el proceso del conflicto, se transforma cuando aplicamos mediación. Se pasa de una emocionalidad tóxica a ver la situación con objetividad y serenidad; de estar a la defensiva a poder negociar haciendo propuestas, siendo creativos y comunicándose desde el respeto y con un lenguaje no violento. Sucede cuando los participantes se dan cuenta de que la otra parte ha vivido el conflicto de una manera muy distinta a la suya. A veces ello desencadena un deseo auténtico de empatizar y otras, simplemente, supone una crucial toma de conciencia. En todo caso, el resultado es el reenfoque del problema y una transformación de perspectivas. Los participantes establecen una conexión mutua y se comunican desde Atractores Motivacionales más inclusivos que los llevan a estrechar su relación.
A través de la mediación, las personas entienden mejor la situación de conflicto, reflexionan sobre sus estilos de pensamiento y hacen ajustes sobre sus conductas. La mediación no sólo sirve para prevenir la escalada de un conflicto, también es una oportunidad para adquirir habilidades de gestión emocional y generar oportunidades de innovación bastante únicas.
En conclusión, la mediación es una vía eficaz para que, culturalmente, se vaya normalizando la expresión de las tensiones y su transformación pacíficamente en interacciones más creativas y productivas.
Catalina Bernaldo de Quirós
Responsable Unidad Mediación Quironsalud Marbella, Directora “Liderazgo Mediador, Formación”, y Gabinete de Mediación “Co-Mediación”. Experta en resolución de conflictos aplicando Mediación y Mental Coach, sesiones de Coaching
T: +34 692250336
Mediation: How will we resolveconflicts in the future?
- We will resolve them through processes of collaborative and mediated dialogue. For example, we should see how broad the current concept of violence of the WHO is and the paradox sustaining it: The WHO defines violence as the intentional use of physical force or power, threatened or actual, against oneself, another person, or against a group or community, that either results in or has a high likelihood of resulting in injury, death, psychological harm, maldevelopment, or deprivation. As you can see, it encompasses many cases. However, our societies, in their vast majority, are governed by constructs based on the maintenance and control of violence. How is this explained and what does it mean?
Johan Galtung, a Norwegian sociologist and mathematician, a great mediator, who passed away a few months ago, offered a very good explanation of how our cultures sustain violence through the legitimisation of attitudes that strengthen prejudice and which are depicted in commercial and political discourses, films, television programmes, social media and, also, in how people interact within our institutions, and how they interact between one another.
So, if on one hand, we take theory and, on the other, we focus on how our societies really work and how overloaded our Courts area, it is blatantly clear that there is a need to encourage Mediation as a process that promotes taking a perspective and provides “immunity” in some way against stimulation and ideas that cause stress, concern, distrust and many other emotions and moods that characterise violent interactions. Mediation processes entail processes of raising awareness. They are processes that encourage critical thinking because they help to order information, prioritise it according to personal values and objectives, and then communicate opinions in accordance with our wishes and interests and not fears.
The change that these tools facilitate socially is to go from copying the opinions of others to encouraging creativity and generating awareness in situ, based on the resolution of existing problems and it is necessary to discuss them in order to resolve them.
Based on this, we find that they way that the opposing parties perceive the entire process of the conflict is transformed when we apply mediation. They go from toxic emotionality to seeing the situation objectively and calmly; from being on the defensive to being able to negotiate making proposals, be creative and communicate through respect and non-violent language. It happens when participants realise that the other party has experienced the conflict in a way that is very different to theirs.
Sometimes, that triggers a real desire to empathise and others, it simply means an essential raising of awareness. In any case, the result is a refocusing of the problem and a transformation of perspectives. Participants establish a mutual connection and communicate with one another through more inclusive Motivational Attractors that lead them to create a closer relationship.
Through mediation, people have a better understanding of the conflict situation, they reflect on their styles of thinking and adjust their behaviour. Mediation is not only use to prevent the escalation of a conflict, but also a chance to acquire emotional management skills and generate opportunities for innovation that are quite unique.
In conclusion, mediation is an effective pathway which, culturally, normalises the expression of tensions and their peaceful transformation into more creative and productive interactions.
More information: www.liderazgomediador.com