Se inicia el reparto de las mascarillas adquiridas por el Ayuntamiento para la comunidad educativa

Mascarillas infantiles

Las mascarillas reutilizables homologadas que ha comprado el Ayuntamiento para la comunidad educativa sanroqueña ya se están entregando a sus destinatarios. En los próximos días, una vez que llegue el resto de las mascarillas adquiridas por la Delegación de Salud, estos elementos de protección se distribuirán entre los estudiantes de Infantil, Secundaria, Bachillerato y Ciclos Formativos.

Los tenientes de alcalde delegados de Salud, Juan Serván, explicó que “estas mascarillas soportan 40 lavados, pero no es necesario lavarlas cada día, porque se pueden desinfectar (si no están sucias). De esta manera, la duración puede ser de varios meses. La idea es hacer un segundo reparto de mascarillas a lo largo del curso, sobre todo si se mantiene la situación como hasta ahora, sin colegios infectados de covid”.

Mascarillas infantiles Mascarillas infantiles

“Como las mascarillas no son obligatorias para los niños de 3 a 6 años -añadió Serván-, en un principio no habíamos pensado en los niños de Infantil. Pero hemos hecho un nuevo pedido que llegará en una semana, porque al final hemos decidido que los más pequeñitos también deben tener estas mascarillas”.

Por su parte, Belén Jiménez, Delegada de Educación, explicó que “vamos a repartir las mascarillas para Primaria, y cuando lleguen las que están pendientes lo haremos en el resto de los ciclos. La intención es cubrir a todo el alumnado del municipio, para que todos ellos puedan tener estas mascarillas homologadas que se ponen a disposición desde la Delegación de Salud, que dirige mi compañero Juan Serván”.

El Ayuntamiento, a través de la Delegación de Salud, ha adquirido más de 10.000 mascarillas higiénicas que cumplen con las especificaciones UNE 0065, para ser repartidas entre alumnado y docentes de todo el municipio. El objetivo es contribuir a la protección contra la Covid-19 de los integrantes de la comunidad educativa sanroqueña, así como ayudar a la economía de las familias, especialmente las más humildes, ante la obligación de adquirir estos elementos para la población en edad escolar.